9 DE JULIO: Azcué, la función de Gala y un desfile cívico militar caótico

Por Almafuerte. (Especial para Diario del SUR Digital)

Las pasadas jornadas de festejos patrios han dejado cierto sentimiento de enfado e indignación en cuanto a lo organizativo.

Se sabe que dicho tipo de eventos requieren de una experiencia y dedicación de muchísimos detalles que no deben pasar desapercibidos por parte de quienes llevan adelante la organización entendiendo que lo institucional es la estricta imagen del intendente en ejercicio del Poder Ejecutivo.

La fotografía política se hizo notar ante la ausencia de una gran cantidad de funcionarios de la gestión municipal que no asistieron ni a la función de honor por el día de la independencia; ni al desfile Cívico- Militar; lo que despertó una serie de críticas hacia los ausentes ya que dentro de sus obligaciones como funcionarios es su deber asistir a estos eventos por los cuales se les paga sus interesantes sueldos respectivos, en tiempo y forma, provenientes de los impuestos de los vecinos y contribuyentes.

Señores y señoras funcionarios, ustedes se deben a sus cargos con lealtad, honestidad y patriotismo. Si ni siquiera tienen el tupé de asistir a los actos patrios no queremos pensar en cuanto a sus compromisos y respectivas responsabilidades como funcionarios.

Tampoco tuvo acompañamiento de algunos de sus socios electorales el intendente Azcue quien estuvo casi solo acompañado por unos pocos, sobre todo de algunos que accedieron a cargos por acuerdos políticos electorales del intendente, que, por capacidad de gestión, y con más necesidades que soluciones hasta sus primeros sueldos. La Función de Honor fue un cuasi simple acto escolar, orientado solo para cultivar la vanidad de los encargados de hacer “la puesta en escena” en el Odeón, que como la gala del 25 de mayo fue una simple movida para que el subsecretario de cultura “El Waly baterola” García oficiara de maestra de música junto con sus amigotes, con alguna que otra modificación de grilla. En fin, un bodrio.

Tema aparte, pero tal vez banal ante lo anterior planteado, fue la torpeza de quien oficiaba de maestra de ceremonia en la Gala al hablar sobre los acordes a de la marcha San Lorenzo. Es decir, la locutora oficial hablaba encima de la marcha mientras era ejecutada de manera brillante por la banda del “Regimiento de Tanques 6 Blandengues”, una falta de respeto que se hizo notar en los rostros del director de la banda y sus integrantes, como también por el mismísimo jefe de regimiento y otros presentes.

Ceremonial del Municipio debería empezar a respetar los símbolos patrios alguna vez y bajar sus ínfulas de superioridad que se caracterizan por sus malos tratos y falta de respeto hacia los asistentes de instituciones que van a estos actos.

Esto es algo que el intendente Azcue debería volver a revisar ya que es él quien termina con una pésima imagen, y lo que debería ser motivo de festejo se convierte en algo bochornoso, desagradable y burdo.

Ceremonial del municipio se encarga particularmente de destratar a las instituciones cuando no se las invita a los eventos públicos correspondientes o cuando se las invita y no se las nombra.

Es de reconocer que la mañana del desfile helado hizo -7° (menos siete grados de sensación térmica) y los niños de las escuelas, sus docentes, los jóvenes de clubes, y grupos scouts fueron totalmente ignorados ante el paso de estos frente al palco oficial donde estaba el Presidente Municipal, lo que ya motivó alrededor de cartas y quejas verbales, mensajes, y llamados en la municipalidad dirigidas hacia Francisco Azcue pidiendo explicaciones por tanta incomprensible falta de respeto hacia quienes de buena fe y sacrificio se allegaron para participar de estos eventos con temperaturas gélidas.

Otra falta de respeto fue la falta de información durante la organización en la columna del desfile porque no había personas a quienes consultar, y esto motivaba el deambular desorientado de las organizaciones que recorrían la avenida sin tener un punto de referencia ni nadie que los invite a ubicarse según la grilla.

Finalmente, otra situación que causó indignación fue el retiro de las entradas en la Oficina de Ceremonial caracterizados por malos tratos, y contestaciones soberbias ante la consulta educada y respetuosa de gente que se allegaba solo a preguntar por los horarios de los actos patrios.

Personas mayores fueron tratadas de forma ordinaria con la falta de amabilidad que caracteriza a esa repartición municipal.

El intendente Azcue recién inicia su mandato y está a tiempo para disculparse por estas situaciones las cuales deberían terminar porque lo perjudican a él, a su imagen y su gobierno.