La recesión llegó al empleo privado registrado que cayó por segundo mes consecutivo
COMPARTIR
Los sectores más golpeados son la construcción, la pesca y el agropecuario, que sufren regímenes flexibles para el despido. El monotributismo sigue en alza.
El lunes se conocieron los datos de la actividad industrial del mes de noviembre que daban cuenta de un retroceso del 4,9% en un sector clave de la economía y con alta generación de empleo formal.
El martes el ministerio de Trabajo difundió el informe mensual de empleo registrado que, basado en datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) de AFIP, dio cuenta de un retroceso en el empleo registrado del sector privado. Se trata de la segunda caída luego de 38 meses consecutivos de crecimiento una vez superado el derrumbe provocado por la pandemia. Se abrió de esta manera una tendencia que puso fin a la recuperación del mercado de trabajo registrada entre agosto de 2020 y agosto de 2023.
Así, en octubre de 2023 los datos oficiales indican que las empresas privadas del país generaban 6.390.400 puestos de trabajo registrados. En apenas dos meses se perdieron poco más de 13 mil puestos de trabajo en el sector privado que representan un retroceso del 0,2% con relación a agosto de 2023 mes en el que se había registrado el récord histórico de empleo registrado del sector privado.
Sin embargo, a escala general, el empleo registrado mantiene su tendencia creciente que ya acumula 36 meses y que en los últimos dos meses lo hizo en un 0,3%. Pero el comportamiento de los diferentes segmentos ha sido dispar en tanto el empleo público creció desde agosto de 2023 al mes de octubre en un 0,5% sumando 18 mil nuevos agentes mientras el empleo en casas particulares se contrajo un 0,4% y los trabajadores autónomos cayeron en un 1,7%.
Del otro lado, lo que explica el crecimiento general son los inscriptos en el monotributo que crecieron un 1,5% en general pero un 5,2% en el segmento de monotributo social que sumó casi 31 mil nuevos inscriptos en apenas dos meses.
El fenómeno de la precarización del empleo registrado no es nuevo. De hecho se mantuvo durante toda la gestión del presidente Alberto Fernández. Mientras que el empleo registrado en general creció desde diciembre de 2019 un 10,4%, el monotributo social escaló un 71,2% y el monotributo tradicional lo hizo en un 24,2%. El empleo registrado del sector privado creció entre diciembre de 2019 y octubre de 2023 un 6,4% mientras que el empleo público lo hizo en un 8,5%.
A la hora de analizar el impacto de la recesión en la actividad privada y su correlación en el empleo surge que la Construcción resignó en los últimos dos meses poco más de 15 mil empleos que representan una caída del 3,25%. En términos relativos el sector más golpeado ha sido el de la pesca que perdió un 4,3% de los empleos que en términos absolutos implican unos 600 puestos de trabajo. El sector agropecuario destruyó casi 5 mil puestos de trabajo que representan un 1,6% del total existente en agosto de 2023.
Se trata de los sectores que, por sus condiciones particulares, reúnen las mayores facilidades para desprenderse de los empleados y, por lo tanto, resultan los más elásticos a los períodos recesivos.
El comercio, por su parte, creó en dos meses 6.500 empleos que implican un crecimiento del 0,5%, la industria manufacturera generó 900 empleos nuevos equivalentes al 0,07% de los puestos existentes en octubre y el sector minero una cantidad idéntica pero que representa casi un 1% de sus dotaciones.