El Plan Frigerio y la interna que se desató en el oficialismo
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Por Daniel Enz (Análisis)
Rogelio Frigerio derrotó a Adán Bahl por más de 17 mil votos y se transformó en nuevo gobernador de Entre Ríos. El exministro del Interior y su equipo anunciarán los integrantes del nuevo gabinete en próximos días y pondrán en marcha una batería de medidas para achicar el gasto público y lograr mayor transparencia en diferentes organismos del Estado. ANÁLISIS anticipa, en exclusiva, quiénes serán los principales funcionarios de su futuro gobierno y por dónde transitarán las medidas de ajuste. Además, la preocupación de Bahl por mantener su estructura de poder político y económico.
Adán Bahl no podía creer lo que estaba sucediendo el domingo a la noche. De golpe, con la derrota ante Rogelio Frigerio -a quien había criticado y descalificado como nunca en las dos últimas semanas-, se estaba quedando sin nada, más allá de las posibilidades de Sergio Massa para llegar a la Presidencia después del ballotage. “Capaz es tiempo de que me vuelva al estudio contable”, repetía ante sus más cercanos seguidores, entre los cuales había caras dolidas y hasta algunas lágrimas por la pérdida casi absoluta de poder y manejo de recursos del Estado, después de mucho tiempo. Por varios minutos, Bahl se olvidó que nunca había tenido un lugar físico como estudio contable, pero algunos de su entorno más íntimo entendían que era un claro mensaje a su amigo y socio de negocios y fechorías, el contador Javier Abdala, no iba a tener inconvenientes en habilitarle un escritorio de su estudio, si era necesario. “Para eso están los amigos”, se acotó. Abdala es uno de los nuevos funcionarios ricos de la administración provincial (como síndico de ENERSA) y con continuidad con Beto Bahl en el municipio, después de la repentina muerte de Eduardo Lalo Macri. Siempre sorprendió a propios y extraños el nivel de vida de millonario del actual secretario de Economía municipal, por el que Bahl viene exigiendo a allegados de la intendenta electa, Rosario Romero, para que continúe en el puesto en su administración, en función de un pacto de muchos años, que los llevó no solo a hacer negocios pocos conocidos, sino también viajes de placer a Brasil, para disfrutar del buceo en el mar por varios días, en medio de un país empobrecido.
En realidad, es uno de los problemas que ha tenido que afrontar en las últimas horas la ministra Romero, ante la fuerte embestida de Bahl, reclamando endo a operadores directos del gobierno que viene, que queden varios de sus funcionarios y en especial el grupo policial de tareas nunca determinadas, donde varios de ellos se caracterizaron por un aspecto: los controles y cobros mensuales a empresarios de la noche, sin que quede registrado un peso en el municipio. No pocos los llaman los recaudadores nocturnos del municipio, que, a partir del 10 de diciembre, se quedarían sin funciones, porque la nueva intendenta “no quiere saber nada con ellos” porque, justamente, tuvo varias quejas severas de dueños de boliches, bares y restaurantes, que están dispuestos a ir a la justicia si es necesario para denunciar si es que prosiguen, cada una de las maniobras, siempre registradas en cámaras de circuito cerrado de los lugares. Ese grupo policial, liderado por el exjefe de Seguridad de la Vicegobernación de Bahl, el comisario retirado Sergio Tato Mendoza (cuyo crecimiento patrimonial también fue sorprendente), conformado por unos 25 retirados, estaba en principio para desterrar el narcotráfico del municipio, después del desembarco de parte de la banda de Gustavo Tavi Celis, en la gestión de Sergio Varisco, pero quedó claro que a la par comenzaron a realizar “otras tareas solidarias” para beneficio de la superestructura de poder municipal.
Fue el lunes temprano que Bahl lo llamó al titular de Aduanas, Guillermo Michel (figura clave de Massa en su estructura), para preguntarle si iba a tener lugar en un futuro gobierno nacional de Sergio Massa. “Vos podés venir a trabajar con nosotros, en algún área de la Secretaría de Provincias, pero primero hay que ganar”, habría sido la respuesta de Michel, según se supo. No obstante, el martes, Bahl hizo trascender que podía ser ministro de Massa y que iba a ser el jefe de la oposición en Entre Ríos. “Los únicos que pueden ser jefes de la oposición en la provincia son Gustavo Bordet, Michel o Laurito y no Bahl, que perdió”, dijeron en los alrededores de Massa ante la consulta de ANÁLISIS. “Y si ganamos, la relación institucional de Massa será con Rosario Romero”, se acotó.
Y mientras tanto
En el nuevo oficialismo provincial, liderado por Rogelio Frigerio, se miraba de reojo el desgranamiento en el sector de Bahl pero a la vez se seguía de cerca las presiones de su propio sector a Rosario Romero. El exministro del Interior no duda en que tendrá una “buena relación y de respeto” con la ahora intendenta electa, pero por ahora sus prioridades son el armado del nuevo gobierno entrerriano.
Frigerio mantuvo varias reuniones entre el domingo y ayer con su grupo más cerrado para definir lo que será su estructura en el Estado entrerriano. Y este jueves tenía previsto viajar de vacaciones hasta el domingo a la noche, junto a su familia.
Los encuentros cerrados se hicieron en Paraná, Villa Paranacito y Buenos Aires. En la mayoría de ellos participaron, fundamentalmente, su mano derecha y futuro secretario general de la Gobernación, Mauricio Colello y el el diputado nacional y diputado provincial electo, Gustavo Hein, un hombre de excesivo bajo perfil, quien presidirá la Cámara Baja entrerriana desde el 10 de diciembre. Ellos dos son los hombres clave para el armado provincial.
Colello es oriundo de Rosario, estuvo en el Ministerio del Interior junto a Frigerio y luego, con Horacio Rodríguez Larreta fue subsecretario de Vinculación y Comunicación Interjurisdiccional en Ciudad de Buenos Aires. Hein fue intendente de Basavilbaso y diputado nacional.