Durante enero, las fábricas mantuvieron ociosos casi la mitad de sus equipos
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Es por la recesión provocada por el derrumbe del consumo. La industria no tenía niveles tan bajos desde la pandemia.
La industria empleó sólo el 54,6% de toda su capacidad instalada en enero pasado, informó el Indec este miércoles. Se trata del nivel de ocupación más bajo desde junio 2020, en plena pandemia, cuando superó por poco el 53%.
A su vez, es el peor enero de toda la serie estadística, que arranca en 2016 tras la revisión de los índices anteriores. En enero de 2023, en una época de volatilidad económica y financiera, la industria utilizó el 62% de todo su equipamiento.
Que casi la mitad de las instalaciones productivas industriales esté ociosa -más allá de que en enero se producen paradas técnicas y el personal tiene vacaciones- tiene varios significados. De un lado, es un síntoma destacado de la parálisis de la actividad: desciende la demanda y cae el consumo, por lo que los comercios disminuyen sus pedidos a las fábricas. Del otro, implica también un mayor costo de capital ya que las inversiones no regeneran capital.
La baja utilización de la capacidad instalada industrial se une a otros indicadores que expresan esa misma recesión. Por caso, la semana pasada, el Indec informó un retroceso del 12,4% en la producción fabril en la comparación entre enero de 2023 y el mismo mes del año pasado.
Detalles
El sector que tuvo el mayor uso de capacidad instalada fue el de refinación del petróleo, con 83,5%. Esta división es estratégica porque produce prácticamente todo el combustible que se consume en el país y su puesta en marcha implica enormes inversiones de capital. Por eso es que sus niveles de uso de capacidad instalada suelen estar por encima del 90%.
Inmediatamente por debajo se encontraron las industrias metálicas básicas (76,3%), papel y cartón (69,8%), productos alimenticios y bebidas (57,7%), sustancias y productos químicos (57,1%) y productos minerales no metálicos (57,0%).
Los bloques con peores desempeños fueron edición e impresión (53,9%), productos del tabaco (50,5%), productos de caucho y plástico (43,5%), productos textiles (36,7%), metalmecánica excepto automotores (33,4%) e industria automotriz (25,7%).
Respecto de la industria automotriz, cabe recordar que en enero varias plantas automotrices decidieron extender los plazos habituales de cierre de sus plantas por mantenimiento y vacaciones del personal.