El organismo anunció que tiene listas 170.000 toneladas de ayuda humanitaria y equipos sobre el terreno para atender a más de dos millones de personas una vez que se formalice el cese de hostilidades.
Según declaraciones de Tom Fletcher, jefe humanitario de la ONU, durante una videoconferencia realizada este jueves desde Arabia Saudita y recogidas por la propia organización, el organismo ya dispone de 170.000 toneladas de ayuda humanitaria, compuesta por alimentos, medicamentos y otros bienes esenciales. El plan contempla la movilización de “varios cientos” de camiones diarios para su implementación, en respuesta a la situación límite que sufre la población, privada desde hace meses de acceso a productos básicos debido a las restricciones impuestas por Israel.
Fletcher subrayó que el programa está “detallado y probado”, y que los equipos de la ONU se encuentran listos para actuar de inmediato. “Nuestros suministros, 170.000 toneladas de alimentos, medicamentos y otros bienes, están disponibles. Nuestros equipos valientes, expertos y decididos están preparados”, afirmó el funcionario.
El plan de auxilio prevé la entrega de ayuda alimentaria a 2,1 millones de personas y de asistencia nutricional especializada a 500.000 casos severos de desnutrición. Incluye la distribución directa de alimentos, apoyo a panaderías y comedores comunitarios, así como transferencias de dinero en efectivo para que 200.000 familias puedan adquirir productos de su elección.
Además, la ONU se propone restablecer servicios esenciales de agua y saneamiento para 1,4 millones de personas, tareas que implican la reparación de infraestructuras de distribución, la solución de fugas de alcantarillado, la retirada de residuos de zonas residenciales y la provisión de artículos de higiene personal, como jabón, detergentes y toallas sanitarias.
En materia de salud, el plan de emergencia de la ONU busca restaurar un sistema sanitario “diezmado”, proveyendo equipamiento, medicamentos y la mayor evacuación médica posible, junto al refuerzo de la atención básica y de salud mental. También está prevista la entrega semanal de “miles de carpas” y la reapertura de centros educativos temporales para 700.000 niños que han visto interrumpido su acceso a la enseñanza.
Sin embargo, Fletcher insistió en que el éxito del plan depende de cumplir con una serie de condiciones, entre ellas la entrada de “al menos 1,9 millones de litros de combustible semanal”, el restablecimiento del gas para cocinar, la reapertura de todos los cruces fronterizos y la agilización de los controles de seguridad. El funcionario alertó sobre la necesidad de que la población pueda acceder sin obstáculos a la ayuda y recalcó el déficit financiero grave que enfrenta la operación. “Hasta la fecha, solo se ha financiado el 28% del plan humanitario de 4.000 millones de dólares para 2025 en los territorios palestinos”, indicó.
Ante la magnitud de la emergencia, Fletcher advirtió que las 170.000 toneladas actuales no serán suficientes para cubrir el periodo inicial de 60 días, y que se requerirán nuevas entregas, especialmente desde Israel, Jordania, Egipto y Chipre. “Seamos claros: este problema no desaparecerá en dos meses”, expresó el alto funcionario.
Por otro lado, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, también compareció este jueves desde la sede del organismo en Nueva York y afirmó que los recientes avances en el plan de paz para Gaza demuestran que “la solución a los conflictos no está en el campo de batalla, sino en la mesa de negociación”.
Guterres lamentó “todas las vidas perdidas”, incluidas las de trabajadores humanitarios, y calificó los acuerdos como “un alivio” que podría marcar “el amanecer de la paz y el principio del fin de esta devastadora guerra”. Insistió en la urgencia de aprovechar la oportunidad para poner fin a la ocupación, reconocer el derecho de autodeterminación del pueblo palestino y avanzar en la solución de los dos Estados.
Asimismo, reiteró el pedido de liberación de todos los rehenes, la necesidad de establecer un alto el fuego permanente y de “detener el derramamiento de sangre de una vez por todas”. Subrayó también la importancia de dar acceso total a los trabajadores humanitarios y priorizar la reconstrucción de infraestructuras en la Franja.